Ciriaco Yáñez (1968) es imaginador de vinos, sumiller, especialista en creación y organización de restaurantes y bodegas, para la vinateria yañez ha creado licores y vinos dentro de diferentes proyectos; master en el metámodelo de análisis Transformacional MAT, también es coach MAT. Escritor y poeta autodidacta comenzó a escribir jovencito entre las cajas de la vinatería . Senda trillada fue su primera obra, una recopilación de poesías escritas especialmente para las botellas de sus primeros vinos diseñados en Logroño para el taller de vino Yáñez y en Somontano para winemaker Yáñez, así vieron la luz y unieron la escritura a su destino vinatero. Publicó diferentes relatos en Heraldo de Aragón y otros medios aragoneses; y en su juventud editó y dirigió una modesta revista “el lagar y la almazara” sobre el vino y la gastronomía; y mientras se formaba como vinatero, sumiller , gastrónomo y cocinero, escribió “andando las tierras zaragozanas” un librito de viajes y costumbres, y “mis platos, vinos, flores y música escojidos” una visión filosófica y una reflexión a través de los platos, los vinos…sobre el amar, comer, beber y vivir. La guía de vinos de Aragón y numerosos artículos de divulgación enológica y gastronómica jalonan su trayectoria. Durante dos años viajó por todo el mundo, veintiséis países fueron retratados en unas crónicas llenas de color, amor y reflexión “en busca de la felicidad” se titularon, y nos aportaron una visión diferente de esos países y el amor cortes, el kendo, el ikebana, la aventura… otras obras recopilatorias son: “cartas de amor de un adolescente” la correspondencia epistolar entre un adolescente y su amor platónico, “diario de un sueño” en el que un joven intenta encontrar su camino,”el viaje del agua” al Méjico chamánico profundo de la península de Yucatán y las aventuras que allí suceden, “cartas desde Paris” aventuras de amor de un artista callejero ilustradas con dibujos, que allí pintó entre sus parques bebiendo y viviendo el amor; ahora está trabajando en un nuevo proyecto “cartas nocturnas” donde intenta expresar corazón , alma y espíritu desde un punto de vista lúdico, crecedor y comprensible, además de un libro de cata que recoge la experiencia de veintiséis años de catas en todo el mundo. El último libro publicado es “cocina tradicional aragonesa” un recuerdo de encuentros en las cadieras de Aragón. Es pintor autodidacta, con diferentes exposiciones realizadas y diferente critica. Quizás donde más reconocimiento ha recibido sea en sus trabajos en televisión : “con sabor aragonés donde representaba a un cocinero que hacía recetas en casi cien emisiones, o ya en “la cocina con Ciriaco” un programa con más de cuatrocientas emisiones que dirigió, guionizó y presento en la televisión aragonesa, o ya en una época más madura el famoso “rincón del vino” donde desentrañó los secretos de los vinos y de las zonas vitivinícolas de nuestro país. En la radio disfrutó de una experiencia única colaborando de la mano de los grandes profesionales de la cadena ser en Aragón durante seis años, en el “hola Zaragoza”.Ahora está trabajando sobre un proyecto en el que dar a conocer la gastronomía, los vinos, los espacios, a través del viaje como experiencia iniciática.

Una faceta muy prolífica y completa de su trayectoria es la creación de vinos. Comenzó a trabajar en la tienda de su familia: la vinatería yáñez de la calle madre sacramento 16 de Zaragoza con quine años y en el restaurante de su padre el conocido humilde rincón como pinche; de forma simultanea atendió la tienda y se formó como sumiller en la primera promoción de sumilleres aragoneses, creó un nuevo concepto: las catas maridadas en su espacio “lahojarasca”y se dedicó a dar conferencias sobre la gastronomía y a cocinar para grupos con los que compartir el espacio y el disfrute. A la jubilación de don José Yáñez dirigió el humilde rincón ya rebautizado como elhumilde y así se expresó en una faceta nueva: la de chef. Cientos de platos, de recetas y de maridajes jalonan esta experiencia, así como la asesoría a diferentes restaurantes y bodegas. Al final venció la necesidad de intentar plasmar los vinos que le bullían en el magín y se enamoró de la tierra de Calatayud, allí creó un proyecto muy pequeño para hacer vinos con corazón: la Compañía de vinos Yáñez laderas de Calatayud, un camino hacia el cielo. Vinos que se expresan en los más diferentes lenguajes y que son embajadores de una manera de ver la vida: amar, disfrutar, estar, reflexionar, y la autenticidad creadora. Además le encanta probar experiencias nuevas en los sitios más dispares en forma de vinos de garaje y las canaliza a través de su compañía winemaker yáñez. Y no olvidarnos del taller de vino Yáñez, un espacio al modo francés de selección y embotellado con marcas propias con veintiséis años de selecciones a sus espaldas. Un taller que se ha completado con las ideas Yáñez vinos que hace Ciriaco, el Taller Yáñez, vinos que hace con amigos, y Almacenista, vinos que diseña Ciriaco y que fabrican en todo el mundo con su dirección. El taller de destilados nobles Yañez (2000), el taller de cerveza única (2010) el taller de gastronomía (1990) y el taller de arte ( 2000). Si quiere existir un eje en su vida ese está basado en el amor y reflexión, en el amor y la tristeza o por lo menos es su objetivo vital amar, beber,vivir.